uno de los mitos recurrentes a la hora de preparar EL VIAJE y leyendo blogs de mucha gente que se lo está pensando es el de comprar un coche o alquilarlo.
Muchos piensan que comprando un coche en Los Ángeles o en Chicago, y vendiéndolo en el otro extremo, será más barato que alquilarlo. Además se piensan que un clásico americano descapotable, sera fácil de conseguir y además será barato. ¿Mito o realidad?
MITO
Sin duda.
A pesar de que el mercado de vehículos de segunda mano en USA es impresionante, hay que tener en cuenta que su amor por los coches roza la obsesión. En especial por los modelos clásicos que son cuidados como oro en paño, y que si están cuidados y mantenidos como es debido, se revalorizan y tienen unos precios bastante elevados. Si no están en buenas condiciones... ¿Nos vamos a arriesgar a quedarnos tirados en medio del desierto y echar a perder lo que llevamos mucho tiempo preparando?
Si nos olvidamos de los clásicos, y pensamos en coches "generalistas", la oferta es muy amplia y con buenos precios, pero ...... ¿Vamos a recorrer LA RUTA en un Ford fiesta o en un Hunday?... Seamos serios.... (El que lo vaya a hacer en uno de esos, que deje de leer esto, y se vaya a un blog de cocina).
En todas las ciudades, grandes, pequeñas o medianas, hay decenas (o cientos) de negocios de compra venta de vehículos, pero .... ¿Y la garantía?.. Pensad qué puede pasar si habéis comprado un coche en Los Ángeles y en mitad de New México o en la Oklahoma profunda se os para el motor. Además, si eso sucede, como dice Murphy, pasará el sábado a última hora de la tarde, y vuestro coche será de un modelo para el que el taller local más cercano no tiene recambios y los tiene que pedir. ¿Os lo imagináis? En el mejor de los casos, 2, 3o 4 días hasta que podéis continuar.... Y generalmente, al menos para la mayoría de nosotros, se viene con el tiempo bastante ajustado, con los vuelos de vuelta comprados .... Olvidadlo.
Los americanos viajan mucho, los billetes de avión en vuelos interiores son baratos, y eso ha hecho prosperar el negocio de las agencias de alquiler. La consecuencia obvia.... Hay mucha competencia, y eso redunda en buenos precios para los clientes.
Hay alguna agencia especializada en alquiler de auténticos clásicos americanos en perfecto estado, pero el precio a pagar por dos os tres semanas, es inalcanzable para la mayoría de los mortales. Así que, salvo que pertenezcas a ese grupo de ricachones, opción olvidada.
Sea cual sea el coche en el que estáis pensando en hacer LA RUTA, siempre pensando en coches modernos, y en especial en un "muscle car" estilo Mustang o Camaro, hay varias agencias nacionales que tienen cientos de delegaciones por todo el país, en las que vais a encontrar los precios más competitivos, y con las que incluso si eres muy muy temeroso, puedes firmar una cláusula de "rescate con mecánico" por unos cientos de dólares adicionales, en la que te garantizan asistencia en menos de dos o tres horas. Yo no lo hice, ya que el número de delegaciones es inmenso, con lo que por esperar un poco más me sentía cómodo, y el coste no me encajaba. Pero bueno, se tiene esa posibilidad.
Las condiciones normales de contratación de coches de alquiler en estas compañías garantizan sustitución del vehículo en cualquier delegación, tranquilidad más que suficiente.
Algo a tener en cuenta a la hora de hacer números... Al precio del alquiler hay que sumarle siempre unos 500 dólares por dejar el vehículo en la otra punta del país.
Sin intentar hacer publicidad, mi experiencia con Álamo Cars fue excelente. Un Ford Mustang convertible, con poquísimos kilómetros, y que no me dio ni un solo problema en los más de 5.000 kilómetros.
Para evitar problemas, confirmar que contratáis seguro a todo riesgo;asimismo, revisar la clausula que hable del depósito de gasolina. Lo normal es que lo entreguen lleno, pero algunos alquileres no requieren que lo devuelvas igual. Otros, si no lo haces, te cobrarán la diferencia (y a un precio superior al de las gasolineras).
Pues lo dicho. Dentro de unos días, segunda entrega de esta serie.
Besos y abrazos a tod@s.
Después fuimos a la Blue Whale, una construcción en forma de ballena a la orilla de un lago que tiene toboganes para tirarse desde ella, y que fue el regalo de un hombre a su esposa. Pero, después de ver dos serpientes en el agua... se nos quitaron las ganas de bañarnos.
Por la tarde entramos en una "curiosity shop" donde un hombre muy peculiar (y muy amable) había creado una exposición de carteles, señales etc de LA RUTA. Tuvimos el gusto de hablar con el unos minutos y nos enseño cosas muy interesantes.
